Si has llegado hasta aquí buscando muebles o inspiración, quizás sea porque tienes entre manos un proyecto de casa nueva o mudanza.
Aunque ello conlleve altas dosis de ilusión, sabemos que el estrés en una mudanza suele estar presente por todo el caos y quebraderos de cabeza que conlleva.
Sin embargo, las prisas y el estrés no son bienvenidas, una mudanza necesita tiempo, motivación y paciencia para que sea lo más productiva posible.
Muchas personas optan por contratar a una empresa de mudanzas por desentenderse, pero, si no te la puedes permitir, necesitarás establecer un poco de orden y concienciarte del duro trabajo que queda por delante.
Así que es hora de ponerse manos a la obra. En Andaluza de Muebles te damos estos consejos para realizar una mudanza productiva y no morir en el intento.
No dejes todo para el último día
Aunque suene más que evidente, la clave para no saturarse y tener agobios de última hora es ir haciéndola poco a poco.
Empieza por aquellas cosas que ya estén guardadas y que no necesites en el momento de la mudanza: como la ropa de invierno si es verano, el árbol de navidad, toallas y sábanas de repuesto, la vajilla de celebraciones, etc.
Irás ganando espacio poco a poco y el trabajo no se acumulará para los últimos días.
Obra mayor y menor siempre antes
Otro de los grandes consejos que podemos darte es que, si puedes, evites entrar en la casa nueva si no está terminada.
Es decir, labores como terminar una obra, una pequeña reforma o pintura pueden suponer un gran caos entre cajas y bultos por medio. Además, corren el riesgo de mancharse y estropearse.
Procura organizar los plazos para que cuando entréis en la casa nueva, todas las intervenciones estén finalizadas.
Tirar lo que ya no necesites: la solución mágica
Una mudanza también es la oportunidad idónea para poner en valor tus pertenencias. Hay quienes no se dan cuenta de todo lo que tienen hasta que no lo reúnen.
Si mientras empaquetas encuentras cosas que llevabas años sin utilizar, será porque ya no te hacen falta. Acumular solo servirá para que la mudanza sea más pesada y voluminosa. Opta por venderlas en negocios de segunda mano o donarlas a organizaciones benéficas.
Establece una lista de prioridades
Otro de los grandes consejos que te podemos aportar es que empaquetes siempre por categorías y marques las cajas con etiquetas. Esto te permitirá conocer lo que hay en su interior sin necesidad de abrirlas y dejar cosas por medio, así podrás establecer un orden de prioridades a la hora de abrirlas.
Además, un punto clave es disponer de un “kit de supervivencia” con aquellas cosas que sabes que vas a necesitar sí o sí los primeros días como ropa, toallas, sábanas o artículos básicos de cocina.
Por último, te recomendamos que des prioridad a algunas estancias de la casa. Por ejemplo, la cama y la cocina será aquello que vas a necesitar sí o sí en tu día a día. Empieza por ahí y deja otros aspectos como la decoración, montaje de muebles o instalación de dispositivos electrónicos para más adelante.
Ahora que ya tienes estos consejos en tu poder, es hora de ponerse manos a la obra.